Desconozco las palabras precisas, desconozco en que orden alinearlas, si acentuarlas en la primera vocal para que reflejen mayor presencia.....o susurrarlas muy despacio para que simplemente lleguen a vos como por casualidad.

No se si dejarte pasar o no dejarte ir jamas.

No se si es tiempo de decidir o de esperar a que llegue el momento de hacerlo.

Ni siquiera se si te pierdo o te encuentro.

Y es ciertamente extraño porque creo conocerte.

Pero no se como pedirte que cuides esto que hace tanto tiempo murmura tu nombre. Somos esos dos extraños que no miran para atras. No.

La redundancia ocupa este vasto territorio de llaves que abren y cierran, que encadenan que traban la correcta secuencia de mis hechos.

Necesito mas que nada mas.

Empiezo a convencerme de que existis solo porque insisto en reinventarte dia a dia. Solo pretendia alguna certeza. Ni mas ni menos. Solo esperaba que por alguna razon esta distorsion del destino hiciera del agua un sitio seguro donde resguardarse.